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Partiendo de la definición de Propiocepción como la capacidad que tiene el cerebro de saber en que posición relativa se encuentran las partes del cuerpo, podríamos intentar «engañar» al cerebro intentando realizar ciertos tipos de ejercicios con los ojos cerrados o sobre superficies inestables.
Una forma que a mi me gusta para trabajarla en los ejercicios de fuerza es realizarlos con una intensidad baja en relación con la que solemos utilizar y centrarnos en notar como trabajan los músculos de manera aislada al realizar el ejercicio.
Algo que a mi me ha ayudado mucho en este tema ha sido utilizar progresiones de baja intensidad, utilizar gomas elásticas como ayuda y grabarme a menudo. Todo esto ayuda a poder entender el movimiento y corregir la técnica.
Desde mi punto de vista una opción de entrenamiento sería con superficies inestables, hasta cierto punto. No con una inestabilidad total pero si con cierta inestabilidad.
En primer lugar usando la inestabilidad con dos puntos de apoyo e ir restando para ver si con un solo punto de apoyo es posible.
No obstante creo que es una buena opción para calentar de manera progresiva ya que el sistema nervioso va adquiriendo conciencia.
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